Un verdadero escándalo supuso en Rusia el caso de una mujer que engañó a su esposo sobre un supuesto embarazo y la pérdida de este, una mentira que hizo crecer hasta límites macabros.
Y es que el hombre halló muñecos en la tumba de los que creía sus hijos, después de que su esposa mintiese sobre estar embarazada de gemelos, así como de un posterior aborto, publica el diario Metro.
Las mentiras de Laura Daudov se multiplicaron rápidamente después de que ella afirmase haber recibido una prueba de embarazo positiva. Según ella, la alegría con la que su marido recibió la noticia le hizo imposible contarle la verdad.
«Vi lo feliz que estaba mi esposo cuando le dije que estaba embarazada. No quería molestarlo y por eso decidí mentirle a él ya nuestros familiares fingiendo el embarazo», confesó la mujer sobre su engaño.
Laura subrayó que «no tenía un plan claro. A veces sentía como si mi barriga creciera, sentía como si estuviera embarazada. En enero fui a echar un vistazo a las cunas para bebés. Es difícil de explicar, por un lado sabía que no estaba embarazada, pero no podía dejar de fingir».
Tanto fue el engaño que incluso llegó a alquilar un piso cerca del hospital. Y pasados los nueve meses, la mujer dio a luz, aunque contó que los gemelos murieron de un «aneurisma de hemorragia cerebral»
«Ese mismo día mi esposo me dijo que teníamos que enterrar a los bebés en Daguestán, en el cementerio de su familia», comentó Laura. Y fue en el funeral donde el hombre encontró a los muñecos envueltos en mortajas.
Foto: VK.com/MVD Dagestan.