Con el fin de poder cumplir sus responsabilidades, llegar a centros de estudios, de trabajo o simplemente de traer comida, los vecinos de la zona de Piraera agarraron una soga de extremo a extremo y empezaron a cruzar uno por uno. Autoridades piden no hacerlo más, pues cruzar un río desbordado es desafiar a la muerte, es un riesgo que no deberían de tomar y pide más cautela.