Hay actores que se comprometen de tal forma con sus personajes que pueden llegar a modificar su cuerpo e incluso vivir como ellos. Los casos más emblemáticos son Robert De Niro, Christian Bale y Tom Hardy, quienes han llevado sus cuerpos al extremo, ya sea adelgazando o subiendo de peso de forma preocupante.
Sin embargo, cambios físicos así de drásticos pueden tener consecuencias nocivas para el cuerpo humano y bien lo sabe George Clooney, quien debió ser hospitalizado tras perder 12 kilos para su última película. El actor de 59 años bajó tanto de peso que cuatro días antes de iniciar el rodaje de The Midnight Sky, cinta que protagoniza y dirige, fue hospitalizado de urgencia con fuertes dolores de estómago.
"Creo que me esforcé demasiado para perder mucho peso en poco tiempo y seguramente no me estaba cuidando", dijo Clooney en conversación con Mirror. Según cuenta, tardó varias semanas en mejorar y el hecho de ser el director del filme no ayudó mucho. "No es tan fácil porque necesitas energía", agregó el actor a quien además se le diagnosticó una pancreatitis aguda.
La película narra la historia de un científico que realiza un estudio en el Ártico y que trata de impedir el regreso de una nave espacial con la que contacta durante su investigación. Su personaje, además de perder peso, lo obligó a dejarse crecer la barba, algo que no agradó mucho a su familia. "Mi esposa e hija se mostraron muy felices cuando terminó porque era muy difícil encontrar una cara debajo de todo ese lío". The Midnight Sky se estrena a través de Netflix el próximo 23 de diciembre. Foto: Captura de video