Turquía
La tragedia ha sacudido Turquía y Siria este lunes al registrarse dos fuertes terremotos en los que han perdido la vida más de 2.700 personas.
Los seísmos dejan al menos 13.000 heridos entre ambos países y se espera que el número de víctimas mortales aumenta a medida que avanzan las labores de rescate, que continuarán durante la noche para dar con más heridos y desaparecidos entre los escombros y las zonas de difícil acceso.
El primer temblor, de magnitud 7,8, se ha producido a las 4:17 de la madrugada del lunes, derribando miles de edificios en ciudades densamente pobladas.
A este le han seguido hasta 42 réplicas y un segundo temblor, a las 13:25 hora local, con epicentro en la misma región, de magnitud 7,5. Otros países vecinos, como Irak, Chipre, Líbano o Israel también han sentido los temblores.
Se trata del mayor terremoto registrado en Turquía desde 1939. El anterior más grave se había producido en 1999 en Izmit (magnitud 7,6), dejando también miles de muertos.
Los geólogos explican que Turquía es una zona de alta actividad sísmica, ya que allí confluyen tres placas tectónicas: la de Anatolia, la de Arabia y la de África.