El TPS para hondureños vence el 5 de julio, y la experta en derecho migratorio, Ismania Platero advirtiò que es más probable su cancelación que su renovación.
Con 100,000 beneficiarios en riesgo, la decisión dependerá del gobierno de Trump, que ha criticado la corrupción en Honduras.
Si no se renueva, miles perderÃan permisos laborales y protección, agravando la crisis migratoria y económica para familias dependientes de remesas.