Susan Sarandon, que en octubre cumple 75 años, está abierta a una nueva relación pero pone criterios muy específicos. «No me importa si es un hombre o una mujer. Quiero decir, estoy abierta a todas las edades, a todos los colores. Esas cosas para mí son solo detalles. Lo que me interesa es alguien que quiera ser aventurero pero, eso sí, que se haya vacunado contra el covid», explicó la actriz en una entrevista con la presentadora Caroline Stanbury en su podcast «Divorced Not Dead».
Pero la protagonista de «Thelma y Louise» no se quedó solo en eso. También reveló que prefiere a los hombres más jóvenes porque son «curiosos» y aseguró que tampoco busca una celebridad, simplemente alguien a quien «le apasione lo que hace».
«Esa persona podría ser una maestra de escuela, o podría ser un escritor o podría tener éxito o no… alguien que sea dueño de sí mismo y que no se deje intimidar por la gente que se acerca (a mí) en la calle y diciendo: ‘Dios mío, te amo'», comentó Sarandon.
De todas maneras, la actriz también admitió que está perfectamente feliz sola. «Me estoy divirtiendo. Estoy bastante abierta a la idea de estar con alguien, aunque necesitaría alguien extraordinario para compartir mi botiquín en este momento», dijo.
La ganadora del Oscar está comprometida con muchas causas, sociales y políticas, y sus declaraciones son objeto en muchas ocasiones de polémica. «Pido perdón en nombre de mis compatriotas por la presidencia de Donald Trump», dijo tras la llegada del republicano a la Casa Blanca. «En Estados Unidos hay cada vez más personas conscientes de lo que supone el gobierno de Trump y ya piensan en reconstruir todo lo que está destruyendo. No es el fin del mundo, hay gente que está luchando para cambiarlo», añadió.
También había arremetido en la campaña contra Hillary Clinton de quien dijo hubiera sido «muy peligrosa» como presidenta de Estados Unidos. Sarandon, que era partidaria de Bernie Sanders —el rival de Clinton en las primarias del Partido Demócrata—, votó finalmente por la candidata del Partido Verde Jill Stein, publica El País.
Con un Oscar, un Premio del Sindicato de Actores, un Bafta y el reconocimiento a su carrera en el Festival de Cine de San Sebastián, entre otros, Sarandon se ha convertido con el paso de los años en más que una actriz; es también un ejemplo para muchas mujeres. Defiende sus arrugas como signo de vida y coherencia, su escote como símbolo de que las mujeres no tienen por qué renunciar a ser sexis condicionadas por la edad, y lleva el activismo por bandera, una forma muy lúcida de reivindicar que su fama sirve para más que para pasearla sobre la alfombra roja.
Foto: Shutterstock.