El anuncio del regreso de Kevin Spacey al cine ha generado una serie de reacciones en la industria cinematográfica, a pesar de que el papel que interpretará en la cinta «L’uomo che disegnò Dio», debut en la dirección del actor Franco Nero, será muy breve.
La polémica se debe a que este retorno se produce a menos de cuatro años de haber sido acusado de abusos sexuales por varias presuntas víctimas, y con investigaciones de la policía de Los Ángeles y Scotland Yard todavía pendientes. Así, Spacey ha vuelto a ser convocado delante de las cámaras en una nueva producción cinematográfica de producción italiana, en la que además interpretará el papel de un investigador de abusos sexuales, lo que parece un giro irónico difícil de pasar por alto.
El propio Franco Nero, además de dirigir, será el protagonista de la película junto a Vanessa Redgrave, su pareja desde que se conocieron en el rodaje de «Camelot» (1967). El legendario actor de spaghetti westerns como «Django» (1966) fue el primero en defender la decisión de contar con el protagonista de «Belleza americana» en su primera película como director. «Lo considero un gran actor y estoy deseando que empecemos a rodar», afirmó al anunciar la puesta en marcha del proyecto.
Louis Nero, productor del filme, ha ido incluso más lejos en su apoyo de Kevin Spacey. «Es un gran actor», dijo a la cadena CNN, antes de proclamar que considera «falsas» las acusaciones realizadas contra el actor. En una línea similar se ha expresado el cineasta Paul Schrader con motivo de la noticia de la contratación de Spacey.
Schrader, que en 2018 ya expresó públicamente su voluntad de hacer una película con el actor, ha compartido la noticia sobre «L’uomo che disegnò Dio» en su perfil de Facebook, acompañado por el siguiente mensaje: «Ya era hora. Si es culpable de algún crimen, que lo metan en la cárcel. Si no, que le dejen actuar. Muchos grandes artistas han sido malas personas».
Acusaciones de abuso sexual
En octubre de 2017, el actor Anthony Rapp acusó a Kevin Spacey de haberle hecho insinuaciones sexuales en 1986, cuando tenía 26 años y Rapp era menor de edad, con 14 años. La acusación fue seguida por una sucesión de otras presuntas víctimas con quienes Spacey también se habría propasado sexualmente, al menos 20 de ellas vinculadas al teatro londinense Old Vic donde ejerció como director artístico.
Aunque algunas de estas denuncias fueron archivadas, el actor sigue siendo investigado por la policía de Los Ángeles y por Scotland Yard mientras está pendiente de juicio en Nueva York por el caso de Rapp. El escándalo de las acusaciones de acoso y abuso sexual apartó a Spacey de la vida pública y profesional.
El actor fue expulsado de su rol protagonista en la serie «House of Cards», cuya última temporada se redujo en número de episodios; se canceló un biopic sobre Gore Vidal que iba a protagonizar y se borró todo rastro de Spacey en la película «Todo el dinero del mundo», sustituyendo sus apariciones por escenas nuevas rodadas con Christopher Plummer en su papel.
Foto: Shutterstock.