Tras el acuerdo de cumplimiento emitido por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, por el asesinato de Pedro Magdiel, mártir de la resistencia, la presidenta Xiomara Castro y el presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo, pidieron perdón a Honduras por los crímenes cometidos en el 2009. Asimismo, se comprometió a continuar con la lucha contra la delincuencia en Honduras.