Una parte de la población hondureña se mantiene en alerta debido a la posibilidad de réplicas tras el reciente sismo de 5.2 grados que sacudió Comayagua, San Pedro Sula y ciertas áreas de Tegucigalpa. El fenómeno, seguido por tres réplicas, ha generado preocupación.
Los sismólogos advierten que más réplicas podrían ocurrir en los próximos días, instando a la población a estar preparada y seguir las precauciones. Las autoridades han lanzado un llamado a la calma mientras monitorean la situación, recordando a los ciudadanos la importancia de tener un plan de emergencia y estar alerta ante cualquier señal sísmica.