Es prohibido olvidar que Honduras llegó a ser el país más violento del mundo con una tasa de homicidios de 86 por cada cien mil habitantes, pero que con valentía, esta generación la redujo al 37.5 –señaló el presidente Juan Orlando Hernández.
Durante el aniversario de la Policía Nacional, el presidente Hernández remarcó que los criminales extraditados se están encargando de emitir acusaciones sin pruebas para dañar la reputación de quienes los han golpeado fuertemente. “Lo hacen en venganza con tal de reducir sus penas con acusaciones ridículas”, dijo Hernández
Son acusaciones ridículas –reiteró Hernández–, de asesinos confesos que están pagando sus penas en cárceles del extranjero luego de ser extraditados. “Los patos les disparan a las escopetas”, agregó.
Para el presidente Hernández, los narcotraficantes extraditados serían capaces de vender a sus propias madres tan sólo por vengarse de quienes los enviaron a prisión.