Productores agrícolas advierten pérdidas económicas por el impacto combinado de lluvias intensas y la canícula pronosticada.
La saturación de suelos y daños en infraestructura vial ya afectan la logística de transporte de cosechas.
José Chacón de FENAGH alerta que la sequía del 15 de julio llegará en pleno desarrollo de cultivos. «Sin agua en etapa clave, los rendimientos caerán drásticamente», explicó, proyectando un fuerte golpe al sector agropecuario.