Ayer jueves se confirmó que Lionel Messi no va más en el FC Barcelona poniendo fin a casi dos décadas de historia en el club.
La noticia es un terremoto, ya que las últimas informaciones decían que ya estaba prácticamente cerrado el acuerdo entre el club y el jugador. Sin embargo, todo se cayó a último momento.
Un día después del bombazo, el presidente del club catalán, Joan Laporta, dio un punto de prensa donde explicó las razones de la salida del argentino.
El mandamás del cuadro español señaló que la solución hubiera sido la inyección de dinero del fondo CVC, sin embargo, afirmó que es inaceptable para los intereses generales de la entidad.
Cabe recordar que el Barcelona arrastra una deuda de 487 millones de euros y que el «legado» financiero dejado por Josep Maria Bartomeu hizo imposible la renovación del contrato de Leo Messi.
«Los números del club son preocupantes. Hemos recibido una herencia nefasta y eso hace que la masa salarial sea de un 110 por ciento de los ingresos totales. Su gestión ha sido calamitosa. No tenemos margen salarial. Hay que cumplir el fair-play, conocemos la normativa, y no tenemos margen. Los números son peores de lo que nos habían dicho», afirmó.
Laporta señaló que el club debe cumplir el fair play financiero por lo que «no podemos hipotecar medio siglo parte de los derechos de televisión. No estoy dispuesto a hacerlo».
«Tenemos una institución con casi 122 años de historia y está por encima de jugadores, incluso por encima del mejor jugador del mundo, que hemos tenido placer de tenerlo aquí», afirmó Laporta.
El mandamás del club reiteró que el Barcelona «está por encima de todo y se ha de preservar la institución», asegurando que «hemos pasado de todo y hemos salido adelante. Yo estoy convencido de que la etapa es exitosa.».
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