Rosa RamÃrez escribió una historia de superación al sacar adelante a sus ocho hijos con la venta de yucas con chicharrón desde 1990.
Lo que comenzó como un modesto carrito se convirtió en un negocio estable que financió la educación de toda su familia.
«Para una madre soltera es duro, pero con dedicación se logran grandes cosas», afirma esta mujer que se ha convertido en ejemplo de resiliencia.