Por segunda semana consecutiva, los autobuses en la Terminal de Jacaleapa, que sirven a la zona oriental de Honduras, permanecen inactivos debido a la extorsión. Tanto conductores como propietarios se enfrentan a amenazas y pagos insostenibles.
La Terminal, punto de partida para once rutas que abarcan destinos como El Zamorano y Danlí, ha sido golpeada por esta ola de crimen. La paralización ha dejado a comunidades enteras sin transporte, generando preocupación y llamados a la acción por parte de las autoridades locales.
