Alejado del reflector de la política y concentrado en desarrollar proyectos personales, así se visualiza el presidente Juan Orlando Hernández, una vez que finalice su mandato el próximo 25 de enero del año entrante.
Al contrario de lo que sostienen líderes de la oposición, que insisten en que Hernández buscará lanzarse otra vez, el actual gobernante aseguró que no tiene interés político y que el próximo presidente será elegido por Dios y el pueblo.
Hernández dijo que los políticos opositores hablan sin fundamento porque tienen miedo a que él gane nuevamente los comicios y para que el Partido Nacional se corone nuevamente ganador debe hacer alianza con los sectores claves de la sociedad.