Desde abril, tras el sorteo realizado en Doha, Ecuador sabía que sería integrante del Grupo A de la Copa Mundial de Catar 2022. Y en agosto fue cuando supo que se adelantaría un día el inicio del certamen y que estaría a cargo del partido inaugural, en su choque contra el seleccionado anfitrión.
Pues todo este tiempo, tras esa confirmación, la Tri se la dedicó a la preparación para el torneo y, claro está, para este debut. Tal planificación la plasmó este domingo y que le otorgó frutos en abundancia, a partir de su firme 2-0, en el Estadio Al Bayt .
A la magnitud del cotejo y la presión que podía ejercerle un motivado cuadro local, los de Gustavo Alfaro lo minimizaron por completo. Es que, tras un breve lapso inicial de intensidad, dominó hasta el final y con holgura. De hecho, no tardó en avisar con un gol de Enner Valencia que, de inmediato, fue anulado por fuera de juego.
Si bien los marrones fueron un mar de dudas, los sudamericanos fueron inteligentes para aprovecharlo. En un principio, optaron por saltar la línea de los defensores, pero, ante los problemas del rival, decidieron hacerse con una amplia posesión de la pelota.
Al momento de disponer del esférico, lo movieron en campo rival y no lo rifaron en ningún momento. En el primer tiempo, fueron amos y señores del duelo, con un 54% de tenencia de pelota, viéndose fortalecidos por el doblete de Valencia, en poco más de media hora. Además, según la estadística de Opta, dieron 184 pases precisos (229 intentos), de los cuales 100 sucedieron en el lado oponente.
Alfaro: «Ganamos el partido más importante del Mundial»
Los goles fueron sinónimos de eficacia por parte de la Tri, ya que, en el aspecto general del cotejo, sacó leve diferencia en la tenencia (52.9%), en sus 486 pases y 411 acertados. Mientras que, en términos de ataque, intentó seis remates totales (tres al arco) contra cinco imprecisos de los contrarios. Eso sí, se destacó por su superioridad en los 14 envíos al área y tres córners.
Fue un 4-4-2 el esquema que utilizó Alfaro, el que, a la hora de recuperar el balón, le permitió ser compacto y punzante al equipo ecuatoriano. Los dos puntas, Valencia y Michael Estrada, fueron esenciales para presionar alto, incomodar y hasta profundizar los desaciertos en la salida de los cataríes.
Defensivamente, Ecuador también tuvo una función notable: acumuló siete entradas exitosas, en 15 realizadas; sumó 12 intercepciones y apenas vio dos tarjetas amarillas, la mitad respecto a los dueños de casa.
Primer avance concretado hacia el sueño de octavos de final. Ahora, se le presenta Países Bajos, en un partido en el que habrá especial atención a los detalles que aparezcan, abriendo una incógnita frente a la fuerza europea: tomar la iniciativa o replegarse para contragolpear. Lo cierto es que, por tratarse del debut, la mano del entrenador ya se vio y quedará en los ecuatorianos sostener en la misma línea para agrandar su ilusión.
Foto: Ecuador