Honduras registra la tasa más alta de impunidad en crímenes contra ambientalistas a nivel mundial, con diversos de casos sin resolver.
Según ambientalistas, el país es uno de los más peligroso per cápita para defensores de la tierra, con muchos asesinatos.
Afirman también que las investigaciones suelen archivarse tras el escándalo mediático, organizaciones exigen que estos crímenes no queden impunes.