La deportación de menores de edad desde Estados Unidos alcanzó cifras alarmantes, con más de 125 mil niños retornados a sus países de origen.
Durante el año 2024, más de 8 mil niños hondureños fueron afectados por estas políticas.
Se proyecta que las deportaciones aumenten en el futuro cercano, exacerbando la crisis migratoria en varias regiones.