La autoexploración mamaria es un método clave para la detección temprana del cáncer de mama, tanto en mujeres como en hombres, quienes representan el un porcentaje minoritario de los casos.
Esta práctica incluye palpar senos, axilas y pezones en busca de bultos, zonas endurecidas o secreciones anormales.
Aunque el cáncer mamario masculino es menos frecuente, su diagnóstico suele ser tardío debido a la falta de conciencia y los estigmas sociales.